La selección uruguaya, dirigida por Marcelo Bielsa, logró una victoria crucial 2-0 contra Venezuela en el Estadio Centenario, acercándose un paso más al Mundial 2026. El partido, correspondiente a las Eliminatorias Sudamericanas, dejó varias lecturas y un particular momento de tensión entre el entrenador y la prensa.
Elogios a De Arrascaeta y Villalba y la recuperación del "ADN" uruguayo
En conferencia de prensa, Bielsa destacó el desempeño de jugadores como Giorgian de Arrascaeta y Lucas Villalba, resaltando la importancia de recuperar la esencia del fútbol uruguayo. "Era indispensable ganar hoy", afirmó Bielsa, enfatizando la necesidad de atacar con continuidad y establecer diferencias en el juego.
El técnico también explicó sus decisiones tácticas, incluyendo la no inclusión de Luciano Rodríguez, y respondió a las preguntas sobre los cambios realizados durante el partido. Admitió que, posiblemente, debió haber manejado los cambios de manera diferente, reconociendo cierta "torpeza" de su parte al no espaciar las sustituciones.
El tenso cruce con la prensa y la pregunta que incomodó a Bielsa
Sin embargo, el momento más comentado de la conferencia fue un tenso intercambio con un periodista. La situación se originó cuando un reportero intentó introducir a Carlos Bonelli, un periodista deportivo argentino que viajó desde España para entrevistar a Bielsa. Bonelli, quien sufre de múltiples discapacidades producto de un accidente, estaba grabando un documental sobre su vida.
Bielsa interrumpió al periodista, mostrando su incomodidad ante la mención de un tema que consideraba ajeno al partido. "Bueno, pero hablemos del partido. No tiene nada que ver ese tema. No sé a qué va la exposición", sentenció el entrenador. Posteriormente, aunque saludó a Bonelli cordialmente, Bielsa reafirmó su postura: "No, no tenemos nada de qué hablar, no me presto a la insistencia intolerable de la gente que te acompaña".
Este incidente generó diversas reacciones en el ámbito deportivo. Algunos interpretaron la actitud de Bielsa como una falta de sensibilidad, mientras que otros la defendieron, argumentando que el entrenador tenía derecho a enfocarse en el análisis del partido y no sentirse presionado a participar en un tema personal.
Más allá de la polémica, la victoria de Uruguay marca un paso importante en su camino hacia el Mundial 2026, y la gestión de Bielsa sigue generando expectativas entre los aficionados celestes.