La tenista colombiana Emiliana Arango protagonizó una historia inesperada en el China Open. Tras ser eliminada en la fase de clasificación por Ella Seidel, Arango se disponía a disfrutar de un merecido descanso, libro en mano, cuando recibió una llamada que cambiaría su destino en el torneo.
La baja de Wang Yafan por una lesión en la espalda le abrió las puertas del cuadro principal como 'lucky loser'. Arango, que se encontraba a punto de tomar una siesta, reaccionó rápidamente ante la oportunidad.
"Estaba leyendo mi libro y pensé: 'Vale, terminaré el capítulo y luego tomaré una siesta'", relató la número 50 del mundo. "Roberto, uno de los árbitros del torneo, me llamó y me dijo: '¡Emiliana, juegas hoy!'. Yo dije: '¡Oh, vale, vale, vale. Me prepararé!'. Mi entrenador y mi primo, estábamos básicamente durmiendo la siesta cuando recibimos la llamada, y luego simplemente nos preparamos, salimos y jugamos bastante bien".
Y vaya que jugó bien. Arango demostró una energía y concentración notables en su segundo chance en Beijing, superando a Suzan Lamens con un marcador de 6-3, 6-3. Su efectividad en el primer servicio (82%) y la conversión de seis de sus 14 puntos de quiebre fueron claves para la victoria.
El próximo desafío: Qinwen Zheng
El camino de Emiliana Arango en el China Open continúa con un enfrentamiento ante la favorita local, Qinwen Zheng, número 9 del mundo y séptima cabeza de serie del torneo. Zheng regresa a la competencia después de someterse a una cirugía en el codo derecho en julio.
Arango y Zheng se han enfrentado en dos ocasiones previas. Zheng se impuso en el primer encuentro en canchas duras hace cuatro años, y repitió la victoria a principios de este año en la segunda ronda del Roland Garros. El partido promete ser un gran desafío para la tenista colombiana.