El Estadio Rey Balduino de Bruselas fue testigo de un vibrante encuentro entre Bélgica y Gales, un duelo clave por las Eliminatorias UEFA rumbo al Mundial 2026. Con aroma a revancha y la necesidad de sumar puntos vitales, ambos equipos se enfrentaron en un partido lleno de emociones y alternativas.
Bélgica busca enderezar el rumbo
Los "Diablos Rojos" llegaban al partido con la presión de obtener su primera victoria en esta fase clasificatoria. El empate ante Macedonia del Norte generó dudas y la afición esperaba una reacción contundente en casa. Con figuras de la talla de Kevin De Bruyne y Romelu Lukaku, Bélgica contaba con el talento necesario para imponerse, pero la solidez galesa presentaba un desafío mayúsculo.
Gales, a consolidar su buen momento
La selección galesa, dirigida por Craig Bellamy, llegaba a Bruselas con la moral alta tras un inicio prometedor. Con un juego sólido, transiciones rápidas y una dupla ofensiva en forma (Brennan Johnson y Kieffer Moore), Gales buscaba dar la sorpresa y afianzarse en la cima del Grupo J.
Un partido de ida y vuelta
El partido fue un auténtico festival de goles. Bélgica tomó la delantera, pero Gales respondió con garra y determinación. Los cambios en el segundo tiempo le dieron un nuevo aire al equipo visitante, que logró igualar el marcador en varias ocasiones. Sin embargo, la calidad individual de los belgas, especialmente de De Bruyne y Lukaku, terminó inclinando la balanza a favor de los locales.
- Bélgica: Necesita mejorar su solidez defensiva para los próximos encuentros.
- Gales: Demostró ser un rival competitivo y con potencial para clasificar al Mundial.
Finalmente, Bélgica se llevó la victoria en un partido para el recuerdo, pero Gales demostró que no será un rival fácil en la lucha por un lugar en la próxima Copa del Mundo.