El partido entre el Barcelona y el Real Oviedo generó sorpresa antes del pitido inicial: Robert Lewandowski, el goleador estrella del Barça, no figuraba en el once titular. ¿Por qué esta decisión?
¿Precaución, táctica o algo más?
La ausencia de Lewandowski, sumada a las ya numerosas bajas que afectan al equipo de Hansi Flick, generó interrogantes. ¿Se trata de una medida de precaución? ¿Una decisión táctica? ¿O existe alguna otra razón detrás de esta sorprendente exclusión?
El Barcelona llegaba a Asturias con una racha positiva, invicto en sus primeros cinco partidos de La Liga, con cuatro victorias y un empate. Además, tiene un partido pendiente para acercarse al líder, el Real Madrid. Tras un inicio de septiembre titubeante, el equipo había recuperado la forma, combinando juventud y experiencia para volver a la pelea por el campeonato.
El Real Oviedo y su lucha por la permanencia
Por su parte, el Real Oviedo disfruta de su esperado regreso a la máxima categoría del fútbol español después de 24 años. El club asturiano estuvo a punto de desaparecer, salvado gracias a las contribuciones de exjugadores y aficionados. Su resurgimiento ha sido notable, pero la diferencia de calidad es evidente. Con cuatro derrotas en sus primeros cinco partidos y un solo gol marcado, el cuento de hadas del Oviedo se ha transformado rápidamente en una batalla por la supervivencia.
Las bajas complican al Barcelona
La preparación del Barcelona no ha sido sencilla. Flick ha tenido que lidiar con una larga lista de ausencias. Gavi está fuera por al menos cinco meses tras someterse a una cirugía de rodilla, mientras que Fermín López se unió a él en la banda por una lesión muscular. Lamine Yamal, subcampeón del Balón de Oro, lleva semanas ausente.
Finalmente, se supo que la decisión de dejar a Lewandowski en el banco fue una combinación de factores. Flick quería darle descanso al polaco, considerando la seguidilla de partidos y la importancia de mantenerlo fresco para los próximos compromisos. Además, buscaba probar otras variantes tácticas y dar minutos a otros jugadores de la plantilla. El partido contra el Real Oviedo se presentaba como una oportunidad ideal para experimentar y gestionar la carga de minutos de sus futbolistas clave.