Susana Villarán al Límite: Juez Decide su Futuro en Caso Línea Amarilla
La exalcaldesa de Lima, Susana Villarán, vive horas cruciales. Este lunes, el juez Jorge Chávez Tamariz definirá si continúa o se revoca el mandato de comparecencia con restricciones que pesa sobre ella en el marco de la investigación por el controvertido caso Línea Amarilla.
¿Qué está en juego? Durante la audiencia virtual programada, el juez deberá determinar si la medida restrictiva impuesta a Villarán y a otros exfuncionarios de la Municipalidad Metropolitana de Lima ha caducado. La acusación principal se centra en la presunta colusión agravada en el proyecto vial Línea Amarilla, donde se alega que las empresas O.A.S. Sucursal Perú y Lamsac fueron favorecidas de manera irregular.
El Contrato Bajo la Lupa
La Fiscalía investiga la presunta manipulación del contrato de concesión del proyecto Línea Amarilla en 2012. Esta manipulación, según la acusación, habría permitido a Lamsac reajustar las tarifas de peajes a cambio de financiar la campaña de reelección de Villarán en 2014. La fiscalía sostiene que tanto la exalcaldesa como otros exfuncionarios incurrieron en actos ilícitos que perjudicaron al Estado.
Ley 32130: Un Nuevo Escenario
La audiencia se realiza en respuesta a la Ley 32130, aprobada en octubre de 2024, que establece un plazo máximo para el mandato de comparecencia con restricciones. El objetivo de esta ley es evitar que estas medidas se prolonguen indefinidamente. El juez Chávez Tamariz también deberá evaluar si la caducidad aplica a otros implicados en el caso Línea Amarilla.
Más Problemas para Villarán
Además de las acusaciones por el caso Línea Amarilla, Susana Villarán enfrenta otro proceso penal por presuntos aportes ilegales de más de 10 millones de dólares provenientes de las empresas Odebrecht y OAS, que habrían sido destinados a financiar sus campañas electorales. En este caso, la Fiscalía ha solicitado una condena para la exalcaldesa.
El futuro legal de Susana Villarán está en manos del juez Chávez Tamariz. La decisión que tome este lunes podría marcar un antes y un después en el caso Línea Amarilla y en la situación personal de la exalcaldesa.