Harta: Reflexiones sobre la Dignidad y la Educación en Perú

“Harta”: Un espejo de la realidad educativa peruana

La película “Harta” (Straw), protagonizada por Taraji P. Henson, narra la historia de Janiyah, una madre soltera que enfrenta una serie de adversidades. Esta historia resonó profundamente, generando reflexiones sobre la situación de miles de jóvenes y familias en Perú que se encuentran al borde del colapso, exhaustos por la indiferencia y la falta de políticas estatales efectivas.

La trama, que culmina con un acto desesperado de Janiyah, refleja la acumulación de injusticias y la falta de apoyo. Esta situación plantea interrogantes cruciales para el sistema educativo público peruano. ¿Cuántos estudiantes se sienten 'hartos' y están al borde del abandono escolar debido a la falta de recursos y oportunidades?

La realidad en los CEBA públicos

En los Centros de Educación Básica Alternativa (CEBA) públicos, se observa a diario a jóvenes y adultos que luchan por superarse a pesar de las dificultades. Muchos trabajan, son padres o madres, y viven con recursos limitados. Su sed de superación es admirable, pero a menudo se enfrentan a la invisibilidad y a la falta de condiciones adecuadas en sus instituciones educativas.

La falta de alimentación, conectividad, materiales educativos, horarios flexibles, respeto institucional y apoyo psicológico son factores que contribuyen al riesgo de abandono escolar. Es crucial que el Estado peruano garantice estas condiciones mínimas para evitar que más estudiantes lleguen al límite.

Ineficiencia estatal y sus consecuencias

Mientras tanto, el Estado peruano sigue financiando la ineficiencia. Las pérdidas millonarias de Petroperú, por ejemplo, podrían destinarse a mejorar las condiciones educativas y brindar el apoyo necesario a los estudiantes más vulnerables. La inversión en educación es fundamental para construir un futuro más justo y equitativo.

La película “Harta” nos invita a reflexionar sobre la importancia de la dignidad en la educación y la necesidad de políticas públicas que realmente respondan a las necesidades de los estudiantes y sus familias. Es hora de pasar de la indiferencia a la acción, garantizando un sistema educativo inclusivo y de calidad para todos.

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