¡Santa Fe Campeón! Crónica de la Décima Estrella y Celebración Apoteósica

Bogotá se vistió de rojo y blanco para recibir a sus héroes. Independiente Santa Fe, tras una final épica contra Independiente Medellín, conquistó su décima estrella, desatando una ola de júbilo que inundó las calles de la capital colombiana. Desde el aeropuerto El Dorado hasta el Parque Simón Bolívar, una marea cardenal celebró con pasión el nuevo título.

Un Recibimiento de Campeones

Familias enteras, jóvenes y mayores, se unieron para dar la bienvenida al equipo campeón. Motos, carros, bicicletas y multitudes a pie convergieron en una caravana interminable, ondeando banderas y entonando cánticos. El grito unánime resonaba: “Ya volvimos, ya volvimos, ya volvimos otra vez, ya volvimos a ser campeones, como la primera vez”. La lluvia no fue impedimento para la fiesta, la alegría era el común denominador.

El 'Muletazo' de Rodallega: Un Gol para la Historia

Veinticinco años y seis días separan el gol de Martín Palermo en el 2000, del tanto de Hugo Rodallega que le dio el título a Santa Fe. Ambos goles, marcados con el corazón y la pasión, quedarán grabados en la memoria de los aficionados al fútbol. Rodallega, al igual que Palermo en su momento, demostró que la garra y la determinación pueden superar cualquier obstáculo.

El gol de Rodallega, un 'muletazo' que evoca la épica de Palermo, desató la locura en el Atanasio Girardot y en cada rincón donde un hincha cardenal vibraba con la final. Un gol que no solo le dio el título a Santa Fe, sino que también revivió el recuerdo de hazañas pasadas y reafirmó la grandeza del fútbol como catalizador de emociones.

Datos Insólitos de la Décima Estrella

  • Primera vez que Santa Fe se consagra campeón como visitante en torneos cortos.
  • Pasaron 59 años para que Santa Fe tuviera al goleador del campeonato (Hugo Rodallega, 16 goles).
  • Jorge Bava se convirtió en el segundo entrenador uruguayo en ser campeón con Santa Fe.

La décima estrella de Santa Fe no solo es un título, es una historia llena de momentos épicos, datos curiosos y una afición incondicional que siempre creyó en su equipo. ¡Salud, campeón!

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