En un giro trascendental, la Fiscalía General de la Nación solicitó formalmente la condena del expresidente Álvaro Uribe Vélez por los delitos de soborno en actuación penal, fraude procesal y soborno, en el marco del juicio que se sigue en su contra. La fiscal Marlenne Orjuela hizo la petición ante la jueza Sandra Liliana Heredia, del juzgado 44 Penal del Circuito de Conocimiento de Bogotá, dando inicio a la fase de alegatos de conclusión.
Tras casi cinco meses de juicio oral, en el que se escucharon los testimonios de 90 personas propuestas por la Fiscalía y la defensa, el ente investigador sostiene que Uribe Vélez, en 2018, habría utilizado al abogado Diego Cadena para contactar exparamilitares en cárceles y ofrecerles beneficios a cambio de declaraciones que lo desvincularan de presuntos nexos con grupos armados en la década de los noventa.
La fiscal Orjuela argumentó que las pruebas presentadas durante el juicio son concluyentes y demuestran la participación del expresidente en las conductas punibles. Según la Fiscalía, la estrategia consistió en persuadir a testigos clave como Juan Guillermo Monsalve Pineda y Pablo Hernán Sierra García para que se retractaran de sus declaraciones originales, que lo comprometían en la investigación.
La defensa del expresidente Uribe ha rechazado categóricamente las acusaciones, argumentando que no existen pruebas suficientes para demostrar su culpabilidad y que la Fiscalía se basa en testimonios contradictorios y poco fiables. Se espera que en los próximos días presenten sus alegatos de conclusión, buscando desvirtuar las acusaciones y lograr la absolución de Uribe Vélez.
Este caso, considerado uno de los más importantes en la historia reciente de Colombia, ha generado gran controversia y polarización en la opinión pública. El resultado del juicio tendrá un impacto significativo en la política colombiana y en la imagen del expresidente Uribe, una figura central en la historia del país.