Los precios del petróleo experimentaron una notable caída este lunes, al disminuir los temores de una escalada mayor en el conflicto entre Israel e Irán. A pesar de los intercambios de misiles entre ambos países durante cuatro días consecutivos, no se han presentado interrupciones significativas en el suministro global de crudo, aliviando la presión sobre los mercados.
El mercado reacciona: Brent y WTI a la baja
El barril de Brent del mar del Norte, con entrega en agosto, descendió un 1,35% cotizándose a 73,23 dólares. De igual forma, el West Texas Intermediate (WTI), referencia estadounidense con entrega en julio, retrocedió un 1,66%, ubicándose en 71,77 dólares. Es importante recordar que el viernes previo, el WTI había alcanzado los 77,62 dólares.
Este lunes, los precios llegaron a retroceder cerca del 4,5% tras la publicación de un artículo del Wall Street Journal que indicaba el deseo de Teherán de una rápida desescalada del conflicto con Israel, lo que contribuyó aún más a la moderación de los precios.
¿Por qué la caída? Calma en el suministro
Según John Kilduff, analista de Again Capital, “Los peores temores del mercado petrolero no se han hecho realidad”. Hasta el momento, no ha ocurrido “nada que pueda afectar los suministros mundiales”. Esta percepción de estabilidad en el suministro ha sido clave para la disminución de los precios.
Implicaciones para Colombia
La caída del precio del petróleo tiene diversas implicaciones para la economía colombiana. Como país exportador de petróleo, una disminución en los precios puede afectar los ingresos por exportaciones y, por ende, las finanzas públicas. Sin embargo, también puede significar una leve disminución en los precios de los combustibles para los consumidores.
Es fundamental seguir de cerca la evolución del conflicto en Medio Oriente y su impacto en el mercado petrolero, ya que la volatilidad en esta región seguirá siendo un factor determinante para la economía global y, en particular, para Colombia.