El mundo del tango está de luto. El emblemático bandoneonista, director, arreglador y compositor Osvaldo Piro falleció a los 88 años, dejando un vacío irremplazable en la música ciudadana. La noticia, confirmada por la Academia Nacional del Tango, entidad de la que era miembro, ha conmocionado a la comunidad artística.
Un Legado Imborrable
Nacido en el barrio de La Paternal el 1 de enero de 1937, Piro inició su carrera musical a los 15 años, integrando la orquesta de Ricardo Pedevilla. Su formación musical comenzó a los 10 años con Félix Cordisco, y continuó con Domingo Mattio, bandoneonista de la orquesta de Aníbal Troilo. También estudió armonía y filosofía de la música, consolidando una base sólida para su prolífica carrera.
Influenciado por figuras como Cátulo Castillo y Aníbal Troilo, Piro desarrolló un estilo único que lo convirtió en una leyenda del tango. A lo largo de más de 70 años de trayectoria, dejó su huella no solo en los escenarios, sino también en composiciones para cine, teatro y televisión.
Amor y Familia en el Tango
El tango también fue escenario de su vida personal. Estuvo casado con la reconocida cantante Susana Rinaldi, con quien tuvo dos hijos, Alfredo y Ligia, ambos dedicados también a la música. Además, es padre de Martín y Lara, completando una familia unida por el arte.
Repercusiones y Homenajes
La noticia de su fallecimiento ha generado una profunda tristeza en el ambiente artístico. Se espera que en las próximas horas, la familia informe sobre los detalles de la ceremonia de despedida. El legado de Osvaldo Piro perdurará en la memoria de los amantes del tango y en las generaciones futuras de músicos.
- Formado bajo la tutela de grandes maestros como Cátulo Castillo y Aníbal Troilo.
- Una carrera de más de 70 años dedicada al tango.
- Compositor para cine, teatro y televisión.
- Padre de artistas como Alfredo y Ligia Piro.
Osvaldo Piro, un nombre que resonará por siempre en la historia del tango.