El Banco Central de la República Argentina (BCRA) anunció la concreción de un nuevo acuerdo REPO ( repurchase agreement) por USD 2.000 millones con un grupo de bancos internacionales. Esta operación tiene como objetivo fortalecer las reservas del país, de cara a la próxima revisión del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Este nuevo financiamiento se suma a otras medidas implementadas por el gobierno para mejorar la posición de las reservas, incluyendo la colocación de BONTE 2030 y la emisión de nuevos títulos en dólares. Se espera que las reservas superen los USD 40.000 millones en el corto plazo, aunque solo una fracción de este nuevo financiamiento se contabilizará como reservas netas.
Detalles del Acuerdo REPO
El acuerdo REPO implica que el BCRA entrega activos (como títulos públicos) en garantía a los bancos internacionales a cambio de dólares. Posteriormente, el BCRA recomprará esos activos en una fecha futura, pagando un interés. En este caso, la tasa de interés acordada es del 8,25% anual. El ministro de Economía, Luis Caputo, había anticipado este tipo de operaciones como una alternativa para fortalecer las reservas, cumpliendo así con los compromisos asumidos con el FMI.
Impacto en la Economía
El fortalecimiento de las reservas es considerado crucial para la estabilidad económica del país. Un mayor nivel de reservas permite al BCRA tener mayor capacidad para intervenir en el mercado cambiario, en caso de ser necesario, y genera mayor confianza en los inversores. Sin embargo, algunos analistas señalan que el aumento de la deuda externa para engrosar las reservas puede generar desafíos a largo plazo.
El Gobierno busca evitar la emisión de pesos para comprar dólares, manteniendo así bajo control la cantidad de dinero en circulación. Esta estrategia es clave para combatir la inflación, uno de los principales desafíos económicos del país.
Reacciones del Mercado
Si bien inicialmente se observó una reacción positiva en el mercado bursátil, con alzas en las acciones, posteriormente se produjo una toma de ganancias que revirtió la tendencia. El S&P Merval experimentó una baja y los ADR argentinos cayeron en Wall Street. El dólar oficial se mantuvo estable, mientras que los dólares financieros operaron sin variaciones significativas.
Algunos analistas consideran que la tasa de interés que el gobierno tuvo que convalidar para obtener el financiamiento indica que la confianza de los inversores extranjeros aún no se ha consolidado completamente.